Imagen: Palau de la Música |
Llega la Semana Santa y, como si de películas de romanos se tratara, la cartelera se llena de conciertos música religiosa. Pero, de todos los tesoros de la agenda (hay unos cuantos), quizás el más lujoso de todos tiene lugar este martes 15 por la noche.
Sir John Eliot Gardiner, al frente de sus formaciones Coro Monteverdi y English Baroque Soloists, y con la participación del Cor Infantil de l'Orfeó Català, ofrece en el Palau de la Música la Pasión según San Mateo de J.S. Bach.
Las entradas ya están agotadas desde hace semanas, especialmente después de la espectacular interpretación de la Misa en Do Menor de Mozart en el Auditori el pasado enero. Completa el elenco el tenor Mark Padmore en el papel de Evangelista. Será una velada histórica, en la que, como explican desde el Palau de la Música, los silencios, el pietismo, los contrastes, el recogimiento, la interioridad y sobre todo el sentido teatral serán los rasgos característi
Gardiner explica en el libro La música en el castillo del cielo. Un
retrato de Johann Sebastian Bach (editorial Acantilado) que su enfoque
personal de la Pasión "se basa en la convicción de que se puede llegar a
una negociación entre la acción y la meditación, no mediante la
sustitución de un conjunto de rituales para otro, sino a través de un despliegue considerado de las fuerzas
musicales en el seno de una iglesia o en una sala de conciertos ".
La Pasión según San Mateo representa el momento álgido compositivo de las nuevas formas de escritura musical que se introdujeron durante el siglo XVII con la irrupción del oratorio como género de carácter religioso. Destinada a la liturgia del Viernes Santo, la obra de Bach fue redescubierta por Mendelssohn en 1829 y se ha convertido en uno de los hitos musicales en la historia de la música occidental. El Orfeó Català dirigido por Lluís Millet, ofreció la primera audición en el Palau de la Música Catalana el 27 de febrero de 1921.
La Pasión según San Mateo representa el momento álgido compositivo de las nuevas formas de escritura musical que se introdujeron durante el siglo XVII con la irrupción del oratorio como género de carácter religioso. Destinada a la liturgia del Viernes Santo, la obra de Bach fue redescubierta por Mendelssohn en 1829 y se ha convertido en uno de los hitos musicales en la historia de la música occidental. El Orfeó Català dirigido por Lluís Millet, ofreció la primera audición en el Palau de la Música Catalana el 27 de febrero de 1921.
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